¿Acepta el reto?
A finales de octubre, las escuelas de St. Vrain Valley, con el apoyo de la Fundación Educativa de St. Vrain Valley, presentaron un concurso de diseño para todo el distrito. Preguntaron a todas las escuelas: "¿Cómo podría tu escuela reunir a un equipo para participar en un diseño auténtico con el fin de integrar la tecnología en nuestras escuelas?".
Con dos años de trabajo de pensamiento de diseño a sus espaldas, un grupo de seis profesores de Indian Peaks Elementary se puso en pie para embarcarse en este viaje de diseño. Como el distrito ofrecía un premio de 4000 dólares al equipo ganador de todo el distrito, el entusiasmo fue grande desde el principio. Los profesores se reunieron primero para repasar los seis componentes esenciales de la tecnología del aprendizaje: objetivos necesarios para su aplicación en el reto. El equipo hizo una lluvia de ideas sobre cómo se utiliza actualmente la tecnología en sus aulas y cómo les gustaría que se utilizara en el futuro. A través de la puesta en común y el debate, dos de los seis componentes se destacaron como un área de interés para el grupo: Liderazgo compartido y visión de los alumnos.
Tras la sesión de lluvia de ideas, un equipo más pequeño se reunió con el gurú del diseño, Co Barry. Co consultó con el equipo mientras definían un reto "perfecto". Dado que la idea del "makerspace" llevaba tiempo dando vueltas en la comunidad de iPeaks, el grupo se decantó con relativa rapidez por un enunciado del tipo "¿Cómo podríamos...? "¿Cómo podríamos desarrollar un makerspace para inspirar una visión compartida del uso integrado de la tecnología?".
Co y el equipo hablaron de las esperanzas y los temores del proyecto. Entre las esperanzas estaban: "inspirar [a la comunidad de iPeaks] a utilizar las oportunidades tecnológicas/de ingeniería con libertad y creatividad", "la tecnología utilizada como herramienta creativa", "la cultura de la asunción de riesgos se extiende por toda la escuela" y "menos centrarse en el producto y más en el producto". Los temores giraban en torno a la idea de que el espacio no se utilizara o que "se dejara de lado para cumplir otros requisitos".
A partir de la categoría de esperanzas, los profesores pudieron ponerse de acuerdo y crear una pequeña declaración de visión. A partir de este pequeño ejercicio, descubrieron que para ellos era importante desarrollar una comunidad de estudiantes innovadores, autónomos, arriesgados e inspirados. El reto estaba evolucionando para ser menos sobre las "cosas" en el makerspace, y más sobre las filosofías y la mentalidad. Las habilidades no serían algo aislado, sino un aspecto del proceso de diseño.
A continuación, el equipo de diseño determinó las posibles partes interesadas en el reto. Con una lista de varias personas, el equipo pudo crear categorías de partidarios, potenciales desaprovechados, influyentes externos, detractores y expertos. El equipo decidió entrevistar y comprometer a representantes de cada categoría para recabar empatía sin realizar un gran número de entrevistas.
Creemos que hemos empezado con buen pie, pero aquí es donde entra en juego nuestra comunidad. El equipo está buscando personas o grupos con experiencia en el movimiento de creación. Este diseño depende de la fuerza de nuestra comunidad, por lo que estamos buscando posibles socios en las primeras fases del proceso. Tanto si eres consultor, profesor, empresario o padre, ¡te necesitamos! ¿Estaría dispuesto a compartir sus conocimientos con nuestro equipo? ¿Nos ayudaría a integrar la fabricación en nuestras aulas? ¿Sabrías comercializar este tipo de espacio entre las familias? ¿Ofrece clases de fabricación para estudiantes o adultos? ¿Aceptarías el reto y ayudarías a Indian Peaks en este viaje?